España pretende arruinar el sueño dorado de Francia en el fútbol masculino
Una España de peligro pretende arruinar el sueño dorado de Francia de coronarse en casa en la final del fútbol masculino de los Juegos Olímpicos, que tendrá lugar el viernes en un Parque de los Príncipes ansioso de vestirse de azul, blanco y rojo.
Con la imagen fresca de la consagración de su selección mayor en la Eurocopa de Alemania, La Roja espera aguar la fiesta de los Bleus, que dirige el mítico Thierry Henry, en el hogar del PSG en París (16H00 GMT).
En el mismo recinto deportivo, con capacidad para 48.000 espectadores, los galos obtuvieron su primera gran conquista futbolística: guiados por Michel Platini, se impusieron 2-0 a la España de José Antonio Camacho y Luis Miguel Arconada en la final de la Eurocopa de 1984.
Semanas después, inauguraron su medallero en el balompié olímpico al derrotar por idéntico marcador, con su combinado Sub-23, al Brasil de Dunga en la pugna por el oro de los Juegos de Los Ángeles.
La situación hoy es ligeramente al revés: los ibéricos aún sienten el calor del triunfo en suelo alemán y se ilusionan con que la llamada Rojita ponga fin a 32 años sin subir a lo más alto del podio, una proeza alcanzada por única vez por Luis Enrique y Pep Guardiola en Barcelona 1992.
- Fe en Fermín -
Dirigida por Santi Denia, exdefensor del Atlético de Madrid, España cuenta con una de las grandes figuras de la competición, el mediocampista Fermín López, parte del plantel mayor ganador en Alemania.
El volante, de 21 años, ha extendido a los Juegos su buena temporada en el FC Barcelona (11 goles en 43 partidos) y ha dado brillo con sus golazos de media distancia a un torneo que sufre la ausencia de las grandes estrellas del balón.
Como no hace parte del calendario FIFA, los clubes no están obligados a prestar a sus mejores piezas para este certamen de categoría Sub-23, que permite el llamado de tres jugadores por encima del límite de edad.
"Ojalá pueda meter en todos los partidos, ayudar al equipo", dijo el volante, artillero de su país con cuatro anotaciones, tras guiar la clasificación en semifinales.
Plata en Tokio en 2021 con los defensas Juan Miranda y Eric García, presentes en París 2024, España disputará su cuarta final olímpica tras vencer a Uzbekistán (2-1) y República Dominicana (3-1) y perder con Egipto (2-1) en el Grupo C.
Con un Fermín encendido, en cuartos mostró su mejor cara para deshacerse de Japón (3-0) y en la 'semi' le remontó al corajudo Marruecos (2-1) de Achraf Hakimi.
- Fiesta en casa -
Pero su adversario ya demostró tener vida sin Kylian Mbappé, que no fue prestado por su nuevo club, el Real Madrid. Y en su primer juego en la capital, tras disputar las pasadas rondas en otras ciudades, espera ser abrazado por los franceses.
Capitaneado por el fogueado delantero del Olympique de Lyon Alexandre Lacazette, Francia tiene pleno de victorias (5) tras cabalgar el Grupo A por encima de Estados Unidos (3-0), Guinea (1-0) y Nueva Zelanda (3-0).
En cuartos dio un golpe de mesa al imponerse a su nuevo archirrival, Argentina (1-0), otro candidato al título, para luego atravesar en la prórroga a Egipto (3-1), que peleará por el bronce con Marruecos el jueves en Nantes (15H00 GMT).
Su cara más reconocida es 'Titi' Henry, campeón del mundo en Francia 1998, en el timón, pero su trío ofensivo ha mostrado un engranaje tan encomiable como letal en el campo.
A Lacazette, de 33 años, se suman dos hombres sin experiencia en la selección mayor, pero responsables de seis de los once goles 'Bleus': el flamante fichaje del Bayern Múnich Michael Olise, de 22, y el espigado atacante del Crystal Palace Jean-Philippe Mateta, de 27.
Mateta marcó dos goles contra los egipcios, uno de ellos para enviar el juego al tiempo extra. "Es un sueño estar en la final", dijo. "Estoy impaciente por estar en París".
(D.Lewis--TAG)