Corte de Hong Kong ordena liquidación de inmobiliaria china Evergrande
Una corte de Hong Kong ordenó el lunes la liquidación del atribulado gigante inmobiliario chino Evergrande, después de que no logró presentar un plan convincente para su reestructuración.
La decisión de la jueza Linda Chan del Alto Tribunal de Hong Kong pone en marcha un proceso que incluye la liquidación de los bienes de la empresa y sustituye sus jerarcas para tranquilizar a sus acreedores.
El acreedor Top Shine Global presentó el año pasado una solicitud de liquidación de Evergrande, pero el caso se arrastró mientras las dos partes intentaban negociar un acuerdo.
"(Considerando) la obvia ausencia de avances de parte de la empresa en presentar una propuesta viable de reestructuración (...) considero apropiado que el tribunal emita una orden de liquidación contra la empresa y así lo ordeno", dijo la jueza Chan.
Recordó que en una audiencia previa, en diciembre, el tribunal "dejó muy claro que esperaba ver una propuesta viable debidamente formulada".
Evergrande debía discutir la propuesta revisada con los acreedores, obtener una opinión legal y consultar a las autoridades chinas, pero "nada de eso ocurrió", reclamó Chan.
El abogado de Evergrande, Jose-Antonio Maurellet, defendió la última propuesta de la empresa y rechazó denuncias de que el grupo hubiera actuado de mala fe.
- Crisis inmobiliaria -
Tras la sesión judicial, un abogado que representa a los acreedores de Evergrande dijo a periodistas que la empresa "es la única responsable por la liquidación".
Las acciones de la empresa se desplomaron 20,87% en la bolsa de Hong Kong tras la decisión judicial y su cotización en bolsa fue interrumpida.
También detuvo la cotización de la filial de vehículos eléctricos del grupo.
Sin embargo, no tuvo impacto en los mercados asiáticos en general, con alzas en las bolsas de Hong Kong y Shanghái.
Evergrande, que fue la inmobiliaria más grande de China, ha reportado deudas masivas y sus dificultades se han convertido en un símbolo de la crisis inmobiliaria que vive el país desde hace años.
El sector de construcción y bienes raíces de China llegó a representar un cuarto del PIB del país.
No obstante, el presidente Xi Jinping consideró que el nivel de endeudamiento de Evergrande y otras firmas era un riesgo inaceptable para el bienestar económico del país.
Desde 2020, las autoridades han limitado el acceso de las inmobiliarias al crédito, lo que provocó una ola de impagos.
Para fines de junio, Evergrande calculó sus deudas en 328.000 millones de dólares.
Shane Oliver, estratega de la firma de servicios financieros AMP, calificó la decisión como "un nuevo paso" en la crisis inmobiliaria china.
"No ha provocado la gran calamidad que muchos temían, pero al mismo tiempo tampoco ha sido resuelta", comentó.
En su criterio, "la crisis inmobiliaria está lejos de ser resuelta y permanece como un lastre sobre la economía china".
(Y.Harris--TAG)