Turquía impone una entrada de 25 euros a los extranjeros que visiten Santa Sofía
Los turistas extranjeros que visiten la antigua basílica bizantina de Santa Sofía -uno de los monumentos emblemáticos de Estambul que desde 2020 es una mezquita- deberán pagar una entrada de 25 euros (27,3 dólares) a partir de este lunes.
La nueva política de entrada está explicada en la explanada frente a la entrada principal del monumento, que está reservada exclusivamente a los ciudadanos turcos.
Un cartel señala que los extranjeros deben entrar por una puerta lateral.
Esta entrada da acceso a un túnel que está debajo el minarete de Beyazit, desde donde los visitantes pueden admirar Santa Sofía, sin perturbar los rezos.
Esta nueva normativa tomó por sorpresa a muchos visitantes y pocos turistas pagaron por entrar.
"Ayer era gratis", dijo un joven funcionario encargado de orientar a los visitantes, que habló bajo condición de anonimato.
El joven confirmó que los peregrinos musulmanes extranjeros que quieran rezar en el monumento, deben pagar igualmente la entrada.
El billete de entrada da acceso a una galería y al museo, destacó, argumentando la necesidad restaurar el templo, una basílica construida en el siglo IV que luego fue reconstruida por el emperador bizantino Justiniano en el siglo VI.
Esta decisión corresponde a un nuevo plan de gestión de los visitantes, por recomendación de la Unesco, ya que el templo es patrimonio de la humanidad.
Transformada por primera vez en mezquita tras la caída de Constantinopla, Santa Sofía, pasó a ser un museo en 1934 por decisión del fundador de la República de Turquía, Mustafá Kemal Atatuk.
En 2020, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dictaminó que el monumento volvería a ser una mezquita.
(Y.Harris--TAG)