Un terremoto de magnitud 6,2 golpea a Filipinas
Un sismo de magnitud 6,2 sacudió el jueves Filipinas, indicó el servicio geológico de Estados Unidos (USGS), aunque las autoridades no informaron de momento de daños.
El sismo se produjo hacia las 10H00 (02H00 GMT) a una profundidad de 124 km, con el epicentro en el municipio de Calatagan, a unas tres horas por carretera de Manila.
El jefe de policía de Calatagan, Emil Mendoza, dijo que los trabajadores de la comisaría corrieron al exterior ante el temblor, que también se sintió en zonas densamente pobladas como la misma capital.
"Fue un poco fuerte. Tuvimos que correr hacia afuera", dijo a la AFP.
No había informaciones inmediatas sobre víctimas o daños causados, pero los servicios de emergencia fueron desplegados en la zona para calibrar el impacto del sismo, declaró Mendoza.
El responsable de la agencia de gestión de desastres en Catalagan, Roland Torres, dijo que la sacudida duró entre 30 segundos y un minuto.
La agencia sismológica del país alertó de posibles réplicas, pero descartó el riesgo de tsunami dada la profundidad del terremoto.
En la capital, los habitantes se precipitaron hacia la calle al notar el temblor.
Las pistas del aeropuerto internacional Ninoy Aquino se cerraron temporalmente para cerciorarse de que no hubo daños en el asfalto, dijo el ministerio de Transportes del país.
El funcionamiento del metro en la capital también se detuvo mientras se comprobaba que no hubiera desperfectos en las vías.
El responsable de información de la oficina de defensa civil, Diego Mariano, dijo que "por ahora no hay grandes daños o víctimas" de acuerdo con los informes disponibles hasta el momento.
Los terremotos son habituales en este archipiélago ubicado en el "Anillo de Fuego" del Pacífico, una zona de intensa actividad sísmica y volcánica que se extiende desde Japón hasta el Sureste Asiático.
En octubre de 2013, un terremoto de magnitud 7,1 sacudió la isla de Bohol, en el centro del país, y provocó la muerte de unas 200 personas.
Numerosas iglesias antiguas quedaron destruidas en la que es la cuna del catolicismo en Filipinas. Además, casi 400.000 personas quedaron desplazadas y decenas de miles de casas dañadas por el sismo.
En 1990, un terremoto de magnitud 7,8 en el norte del país provocó una grieta de cientos de kilómetros y mató a más de 1.200 personas.
(Y.Berger--BBZ)