Comparece ante la justicia uno de los últimos fugitivos del genocidio de Ruanda
Fulgence Kayishema, uno de los últimos cuatro fugitivos buscados por su papel en el genocidio de Ruanda en 1994, compareció este viernes ante un tribunal en Ciudad del Cabo, dos días después de su detención en Sudáfrica.
Detenido después de más de dos décadas en que estuvo prófugo, Kayishema habló con un posado impasible desde el banquillo de los acusados.
Este antiguo inspector de policía, nacido en 1961, había sido inculpado de genocidio, complicidad en genocidio, complot para cometer un genocidio y crímenes contra la humanidad.
Lo acusan, en concreto, de haber asesinado, junto a otros individuos, a más de 2.000 hombres, mujeres y niños refugiados en la iglesia de Nyange, en el municipio de Kivumu, en torno al 15 de abril de 1994.
El Tribunal Penal Internacional para Ruanda (TPIR) había emitido en 2015 un mandato de detención internacional contra él.
La policía sudafricana logró detenerlo el miércoles en una finca vinícola en Paarl, a unos 60 km de Ciudad del Cabo, indicaron las fuerzas de seguridad.
Numerosos ruandeses han sido condenados por la justicia de su país, tribunales internacionales o de países occidentales, por hechos vinculados al genocidio, mayoritariamente de tutsis, en 1994.
El TPIR ha condenado a 62 personas. Otros, como Augustin Bizimana, uno de los principales cerebros de la masacre, murieron sin haber comparecido ante la justicia internacional.
(B.Hartmann--BBZ)